Real Madrid 10 – Rayo Vallecano 2. El tiro en el pie

diciembre 20, 2015

Quizá el partido más raro que he visto en el estadio Bernabéu. Yago y yo hemos asistido atónitos a cómo el Real Madrid empezaba bien, seguía mal y terminaba consiguiendo lo que hacía 55 años que no hacía: marcar 10 veces en casa.

En el minuto 2 marcó Danilo tras una buena contra, propiciada entre otras cosas por la actitud suicida del Rayo Vallecano cada vez que se enfrenta a un grande. Pide el balón, adelanta la defensa, le da por el tiqui taca… y se lleva un saco de goles. Ronaldo, Kroos y Bale movieron con velocidad y precisión el balón y éste acabó en Danilo, que lo embocó. El brasileño ha completado esta tarde un partido muy bueno, quizá el mejor desde que viste de blanco. Es el típico lateral brasileño, más extremo que otra cosa, que nos puede ser muy útil ante defensas cerradas.

Los 10´siguientes el Madrid se tiró a la bartola y el Rayo marcó dos veces, ambas de cabeza. La grada de Chamartín comenzó a pitar al equipo, pero yo pensé que el Madrid ganaría sin problema: pocos equipos nos lo ponen más fácil  que la banda de Paco Jémez. A la que te descuidas, se pegan un tiro en el pie. No hubo que esperar mucho a que uno de los muchachos de Paco cometiese un error funesto: Tito cazó a Toni Kroos en el centro del campo con una entrada brutal, merecedora de tarjeta roja sin duda alguna. Con 1-2 y con superioridad numérica, todos pensábamos que el Madrid marcaría varios goles esta tarde. Pronto empató Bale a pase de Danilo; y la puntilla para los vallecanos llegó con un penalty cometido por Baena sobre Sergio Ramos, que además de la pena máxima fue sancionado con la segunda amarilla. 11 contra 9 con 70  minutos por jugar… se olía la sangre.

Marcó Ronaldo el penalty y llegaron siete goles más: uno de Ronaldo, tres de Benzemá y otros tres de Gareth Bale. Los espacios que concedía el equipo vallecano eran aprovechados sin piedad por el equipo blanco. Disfrutó sobre todo el purasangre galés, que aprovechó su fuerza y su velocidad como pocas tardes. Pero claro, no siempre tendremos dos de más…


Villarreal 1 – Real Madrid 0

diciembre 13, 2015

El Madrid tuvo esta noche un problema de actitud en el primer tiempo y de aptitud en el segundo. Parece increíble que después del sorprendente pinchazo del Barça en casa el Madrid no haya salido a comerse el césped del Madrigal. El primer tiempo hemos sido un equipo vulgar, sin ideas, sin fútbol. Marcó Soldado – que llevaba sin mojar desde agosto – y aún nos pudo caer algún gol más. Y no vimos en todo el primer tiempo el color de la camiseta del portero rival.

En el segundo tiempo el Madrid jugó muy bien. Metió al Villarreal en su área y generó numerosas ocasiones pero ¡ay!, ya no tenemos la pegada que nos hizo famosos. No sabemos marcar goles, y necesitamos 20 ocasiones para hacerlo. Me gustaría saber cuántos años hace que el Madrid no mete gol en cuatro de los primeros 15 partidos de liga (Sporting, Málaga, Barcelona y Villarreal).

Desde fuera, es incomprensible la vuelta de la BBC al XI titular de hoy. Los tres de arriba pueden recibir en casa al Getafe, o cosas así, pero en días de una mínima exigencia necesitamos jugadores más solidarios de lo que son las tres vedettes de arriba.

No tengo ganas de escribir más.


Real Madrid 8 – Malmoe 0. Mensaje a Europa

diciembre 9, 2015

Dudé todo el día si bajar o no al Bernabéu, pues el partido era intrascendente. Pero la ausencia de Bale en la convocatoria me animó. Talibanes del galés, seguid leyendo antes de maldecirme en twitter. Lo que quiero explicar es que era probable que el Madrid saliese con cuatro centrocampistas, y hace tiempo que mantengo que el Madrid juega mejor cuando la BBC cojea de cualquiera de sus patas, porque así el centro del campo se puebla más. Así fue. No sólo éso, salimos con especialistas: Casemiro como cinco tapón, Kóvacic (que no Kovácevic) y James en las alas e Isco de enganche. El resultado: posesión y toque. Control sobre el partido. Los goles cayeron como fruta madura y estuvimos en una noche histórica.

Los dos primeros los marcó Benzemá. El francés es como el protagonista de Tommy, de The Who. Es inútil para todo excepto para jugar al fútbol (Tommy lo era para el pinball). Pero juega de maravilla. Ahora ha cambiado su prioridad y convierte goles en lugar de fabricarlos. Alguno, como el segundo de ayer, soberbio. Durante la primera media hora Ronaldo falló más de una ocasión clara, y los agonías dijeron que andaba reñido con el gol. Una hora después tenían que envainar su afilada lengua, pues el astro portugués marcó cuatro goles anoche y estableció un nuevo record de goles en la fase de grupos. También marcó de falta, poniendo fin a una larga sequía de libre directo. Dirán, claro, que el rival era débil. Igual de débil, digo yo,  que en los cuatro partidos jugados contra PSG o S. Donest, en los que encajó 11 goles en total. El Madrid le ha metido 10 en 2, y Ronaldo 6 de los 10. Números. Ah, otra cosa, además de tantos fallos, Ronaldo fabricó los dos primeros goles, uno por cada banda. No está mal para ser un egoísta.

En el segundo tiempo, esta vez sí, Benítez dio carrete a Jesé y Cherishev, dos canteranos que buscaban el gol como un preso busca la puerta de salida del presidio. Eso hizo que no dejasen de caer goles, y en el minuto 70 el marcador ya era de 8-0. No cayeron más, pero el equipo siguió buscandolos. Y éso es una de las cosas que reclama la afición, seguir buscando el gol en cualquier circustancia. No abandonar ni aunque el Getafe lleve cuatro en el saco… ni aunque el Barça te haya metido cuatro. Fue la desidia de ésos dos días lo que más cabrea a la afición. ¿O es que no les oís cantar? Vamos Real, hasta el final. 

 

 


Real Madrid 4 – Getafe 1. Amar en tiempos revueltos

diciembre 7, 2015

Tras la charlotada cometida en Cádiz al alinear a Cheryshev, el Madrid regresaba al Bernabéu. Aún humeaba el incendio que provocó el FC Barcelona con los cuatro roscos que nos endosó en casa, y el episodio de Carranza fue gasolina en el incendio. Cuando por megafonía se anunció el nombre de Rafa Benítez, un concierto de pito recorrió el Estadio. A los silbidos les sucedieron gritos de «Florentino, dimisión!», que fueron contestados desde la grada de animación por un patético «Ahora más que nunca, te quiero Real Madrid». Nos piden amar en tiempos revueltos.

No olvidemos que los aficionados que ocupan dicha grada son paniaguados del presidente, que los utiliza para llenar de forma artifical el vacío que dejó Ultras Sur tras la portería de los goles. Los sujetos éstos de la Grada Joven obtienen su abono a un precio más bajo, además de haberlo conseguido sin ser socios del club. Normal que estén agradecidos a su amo.

El problema es que Florentino Pérez adolece de toda autocrítica, y sigue una deriva que parece tener como modelo al FC Barcelona de Gaspart y Núñez, apóstoles del victimismo que nunca tenían culpa de nada. Ese sentimiento empapa toda la institución: ni entrenador ni jugadores parecen asumir tampoco error alguno. Igual se arregla lo de Cádiz, igual ganamos al Barça en la vuelta y levantamos muchas copas en primavera, pero es aún no he escuchado a nadie reconocer el mínimo error. Y está claro que alguien se equivocó en Cádiz, porque el ruso no podía jugar. Y que el equipo falló en Sevilla, ante el PSG y ante el Barça. Pero nadie dice «ha sido culpa mía». La culpa siempre es de los demás. Así nos va.

En beneficio de todos, el partido del sábado se resolvió en un periquete. Benzemá anotó en el minuto 4, al rematar con elegancia un soberbio pase de ¡Pepe! desde el callejón del 7. Seis minutos después llegó el segundo, obra también del francés; sospechoso habitual y soberbio futbolista. A estas alturas el Getafe ya había claudicado. Por algo es el peor visitante de la liga. Gareth Bale anotó el tercero tras brillante dejada con la cabeza del Ronaldo y este último anotó el cuarto culminando un contraataque. Aún no había llegado el descanso y sospechábamos que el Madrid se sacudiría sus males con goles.

Pero otra vez tuvimos un decepcionante segundo tiempo. Con el partido resuelto, el Madrid levantó el pie y renunció a dar una alegría a su afición con una goleada escandalosa. Se fue Modric del campo – el croata es la viga maestra – y el equipo pareció vulgar. Incluso marcó el Getafe el gol de la honrilla, lo que provocó otra vez pitos en la grada. Y es que la gente piensa que el Madrid unas veces no quiere y otras no puede; pero nunca completa un partido redondo. Quizá la mejor noticia de la tarde, más allá de que los tres delanteros anotasen,  fue la buena actuación de Lucas Vázquez como lateral derecho. Una demarcación desconocida para él, pero con aptitud y actitud al final las cosas salen bien.


Cádiz 1 – Real Madrid 3. Esperpento

diciembre 2, 2015

El Real Madrid ha ganado en Cádiz pero parece que será expulsado de la competición por haber alineado a Chéryshev, quizá el jugador número 20 ó 21 de la plantilla. Resulta que fue amonestado en la semifinal ante el Barça del curso pasado, y arrastraba una sanción que debe cumplir en el primer partido de la competición que juegue. La sanción, según precedentes, es la eliminación de la competición.

Evidentemente la norma es injusta, pero hay que acatarla como tal. La veo injusta porque el Madrid en ningún momento ha intentado sacar ventaja alineando al ruso éste, que seguramente no vuelva a jugar. El jugador fue amonestado jugando para otro equipo y en otra temporada, Muchas veces hay indultos para estas sanciones y para otras conseguidas por cosas aún más graves, como cuando el Barça no se presentó a jugar ante el Atleti la vuelta de unas semifinales, decididos de forma arbitraria por el presidente de la Federación. Además, en UEFA cuando pasa algo como ésto pierdes el partido por 3-0, y te queda la vuelta para intentar remontar. Como he dicho antes, hay que acatarla como tal.

Como socio que soy, lo primero que he pensado es que me he quedado sin varios partidos de mi abono por una negligencia de alguien que cobra de mi dinero, así que espero que alguien me recompense. No sé quién es el responsable, pero está claro que hay uno. O más de uno, empezando por el propio jugador. Pero los hay. Me da la sensación de que Chéryshev acaba de terminar sus días como madridista. Chendo, delegado del club, debería dimitir; y el entrenador queda muy tocado después de este episodio. Queremos ser profesionales, pero este error es grave. Muy grave.

Eso sí, es un error y todos podemos equivocarnos. Que levante la mano quien nunca se haya equivocado, quien nunca se haya dejado la plancha encendida, el grifo abierto, el abrigo en el trabajo… Ante un error, puedes mostrar comprensión o burlarte. Éso distingue a la gente decente de otros como Piqué, rey de los charcos.

En cuanto al Cádiz, diréis que ha hecho lo que debe y que ha mirado sus intereses, pero yo creo que ha perdido una ocasión estupenda de demostrar señorío. Como lo hizo Osasuna hace unos años, cuando el Barça de Guardiola llegaba tarde a un partido al Reyno de Navarra y el entrenador de Osasuna, un tal José Antonio Camacho, dijo que no se aprovecharía de nada extradeportivo. O como cuando el Hércules no denunció a Messi por jugar como cuarto extracomunitario en partido de liga. Pero bueno, allá ellos. Eso sí,  lo más grande, la frase de «con dolor de mi corazón porque es un club amigo» pero te la clavo. Irse a cagar, hombre…